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A primera hora de esta mañana me encontraba yo con una amiga en lo que será mi nuevo “Barrio”.
Entramos en una librería:
- Buenos días. Quisiera una calculadora.
- ¿Para que curso?
- Hmmm. Esa es una pregunta difícil y más a estas horas de la mañana.
- Se lo decía porque dependiendo del curso….
- Si, si eso lo he entendido. El problema es que no se con certeza y esactitid ahora mismo a que curso va mi hija.
- ¿Qué edad tiene?
-Hmmm, entre 15 y 16 años.
(A todo esto mi amiga ya se había alejado un poco del mostrador, pues no podía contener la risa)
- Esta le irá bien. ¿Desea algo más?
- Si, el libro “El ojo de águila”
- ¿Podría ser “El iris del águila?
- Ah! Pues si. Podría ser ese…
A la salida de la librería, partiéndose de risa mi amiga comenta:
- Buena introducción en el barrio Eme, el de la librería dudo que se olvide de ti.