Para mayor facilidad

30 octubre 2008

-186-

Un día, construyeron un garito.
En el se permitía a decadentes sesentones correrse juergas con jovencitas en edad de merecer.
Los soldados pudieron ser homosexuales.
Los políticos, infieles.
Las princesas, madres solteras.
Los emigrantes prepotentes.
Y los curas...
bueno, a esos siempre se les ha permitido todo.

No hay comentarios: