
Sé que existió ese día, no estaba dormida, si acaso, lo soñé despierta.
Existió como existen mis miedos, y mis dedos de los pies.
Existió como existen mis secretos, mis ideas absurdas, y mis heridas.
Y ese día, esa noche, existió una persona, aunque ahora que la busco no dé señales de vida.
Existió como existen mis secretos, mis ideas absurdas, y mis heridas.
Y ese día, esa noche, existió una persona, aunque ahora que la busco no dé señales de vida.
No, no fueron imaginaciones mías, fue palpable, real...
Existió y sigue existiendo, como existen mis cartas de adolescente y mis libros... sólo que, como ellos, debe estar perdida en alguna de las cajas o de las estanterías.
Existió y sigue existiendo, como existen mis cartas de adolescente y mis libros... sólo que, como ellos, debe estar perdida en alguna de las cajas o de las estanterías.
Existió como un suspiro que dura toda una noche, pero no doy con el.
Encuéntrala…
Encuéntrala…
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